Aunque cocer arroz puede parecer una de las habilidades culinarias más elementales, lo cierto es que lograr que quede al punto tiene su complicación. Hay varias técnicas diferentes, y la de absorción es una que, con un poco de cuidado, nos garantiza un buen resultado. Para lograr este método, es necesario que la cantidad de agua en la olla sea justo el doble que la de arroz. Es decir, por cada taza de arroz, echaremos dos tazas de agua. Lo ideal es calentar el agua, con una cucharada de sal, a fuego alto. Una vez que rompa a hervir, se añade el arroz y se baja a fuego medio. La cocción debe realizarse en dos fases. Primero, a fuego medio durante unos 10 minutos y, después, otros 10 minutos sin fuego, con el propio calor de la olla. Y con esto, ¡tendríamos listo y al punto nuestro arroz.