Para preparar esta guarnición es fundamental controlar el punto de cocción del arroz, para que los granos queden bien cocinados sin que lleguen a pasarse, y a la vez, queden bien sueltos.
Es una guarnición ideal de guisos como el fricandó de ternera.
Lo que sí dejamos claro es que esta receta funciona para hacer el arroz blanco redondo y corto tradicional.
Si queréis saber cómo hacer arroz basmati, la receta es otra ya que hay que ajustar algunos detalles.
El arroz blanco con los granos bien sueltos y en su punto de cocción es una guarnición estupenda y también puede ser la base de otras preparaciones como en ensalada de arroz, verduras rellenas de arroz, platos como el arroz a la cubana y muchas otras elaboraciones.
Para servirlo en caliente, podemos rehogarlo ligeramente con un poco de aceite de oliva o mantequilla en una sartén, justo en el momento en que vayamos a utilizarlo.
Para hacer arroz blanco, lo primero es lavar el arroz, para evitar que los granos tengan un exceso de almidón que hará que nos quede más pegajoso.
Con el arroz blanco ocurre algo similar a otras recetas de cocina y es que existen diferentes maneras de prepararlo, todas ellas correctas y válidas, como sucede también con el arroz integral.
Luego ya podréis hacer lo que queráis con él, como hacer el clásico arroz blanco con tomate, añadirle un ajo o pensar en lo que más os gusta para saber qué echarle.
Se puede cocer en una cacerola destapada, en una cacerola tapada, con el agua medida o con agua abundante y después escurriendo o incluso con un electrodoméstico cocedor de arroz.